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Educación Financiera

¿Qué es un refinanciamiento?

Redacción Kondinero

27/04/2019

Los imprevistos, emergencias, pero también oportunidades están a la orden del día. Si necesitas ayuda para resolverlos no te preocupes, el refinanciamiento es para ti. ¿En qué consiste?

Si actualmente estás pagando un crédito, pero necesitas un extra para resolver algún tema urgente, ya sea médico, legal, o bien, aprovechar una oportunidad de inversión en un buen negocio, tu mejor opción es que sobre ese mismo préstamo te presten un poco más. Esa es la mejor definición de refinanciamiento.

Se trata de una ampliación, renovación, un refinanciamiento de deudas. Este préstamo adicional usualmente está bajo las mismas condiciones que el original.

Al tener créditos (de nómina o personal) con un banco o institución financiera, puedes extender tu línea crediticia vigente, por lo que liquidarás lo que debes y el resto de lo usarás para lo que necesites o quieras. Sin duda es una gran opción.

Funciona así:

  1. Debes ser puntual en tus pagos. Esta es la principal condición para acceder a ella. Si es así, está prácticamente aprobado y bajo iguales o mejores condiciones a las de tu préstamo original: mismo plazo, tasa de interés, etc.
  2. Solicitud. Si tienes buen historial es probable que aprueben tu petición. Para ello deberás contactar a la institución con quien tienes el financiamiento.  
  3. Una vez aprobado el dinero se depositará en tu cuenta de nómina o de débito, si es el caso.
  4. En algunos casos tomar esta opción te permite reducir tus cuotas mensuales, semanales o quincenales al aumentar el tiempo de tu actual deuda.
  5. Este nuevo monto te ayudará a pagar tu deuda y el dinero excedente puedes destinarlo a otras necesidades. De esta forma podrás ahorrar dinero y lograr tus metas financieras, pagar menos interés, iniciar un plan de negocio o cualquier otro propósito. Esto es refinanciar.

Cuando tienes un préstamo vía nómina y solicitas extenderlo, las posibilidades aprobación son mayores.

Recuerda que además de los bancos, algunas Sociedades Financieras de Objeto Múltiple (Sofom) se especializan en el otorgamiento de créditos de nómina y refinanciación, lo que permite a los usuarios tener mayores posibilidades de obtener los recursos que necesitan.

Esta modalidad te ofrece varias ventajas sobre otro tipo de créditos:

  • Préstamo personal. Usualmente tramitarlo es engorroso, en especial si de reunir y entregar documentos se trata, así como tener buen historial crediticio y depositar en sucursal en cierta fecha.
  • Tarjetas crédito: Para solicitarla necesitas reunir varios documentos y presentar un buen historial en el Buró de Crédito. El hecho de tener que desplazarte para hacer los depósitos, así como la acumulación de meses sin intereses hacen que muchas veces los usuarios pierdan el control de sus finanzas personales.   

Uno de los productos crediticios más problemáticos son las tarjetas de crédito, pues los mexicanos manifiestan que tienen dificultades para usarlas pues no las aceptan en todos lados, además de que prefieren liquidar de contado, de acuerdo con la ENIF 2018.

Por ello si necesitas recursos adicionales no te desgastes ni busques en ningún otro lugar, pues al refinanciar préstamo evitarás todos los obstáculos anteriormente mencionados. Al ser cliente de la institución y tener buen historial será más fácil que aprueben tu solicitud.

Tipos de refinanciamiento

Otro tipo de renovación crediticia que también tiene que ver con menos tasas de interés y reducir costos es la referente a los préstamos hipotecarios, pero puede ser para otros tipos de crédito y consiste en que después de cierto tiempo puedes cambiar de institución para reducir pago de intereses, montos y plazos.

En algunas instituciones esta forma de volver a financiar créditos tiene la siguiente clasificación:

  • Constante. Después de comunicarte vía telefónica para conocer si tienes una oferta disponible deberás acudir a la sucursal de la entidad con quien tienes el crédito para solicitar un folio, que formalizará el trámite y además te permitirá cobrar el monto.
  • Masiva. Si en tu primer contacto vía telefónica te indican que tienes disponible un nuevo préstamo y proporcionan un folio, deberás presentarlo en la sucursal de la institución para que descarguen el contrato y así puedas cobrar el monto en la entidad bancaria donde recibes tu nómina.

En ambos casos el trámite inicia vía telefónica y el banco o institución evaluará las solicitudes antes de aprobar estos nuevos créditos.

¿Quién puede solicitar un refinanciamiento?

Está disponible para todos aquellos que que tienen créditos de nómina o personales, pero que son puntuales en sus aportaciones; sin embargo, los trabajadores del sector público como maestros, empleados de gobierno estatales y locales, del sector salud, jubilados y pensionados del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) tienen mayores posibilidades de acceder a este tipo de renovación de créditos.

El pago constante y oportuno de su nómina los vuelve candidatos ideales para una ampliación crediticia. ¿Eres trabajador de alguna de estas áreas? Tienes más probabilidades de que las instituciones financieras confíen en ti

¿Cómo solicitar un refinanciamiento?

Usualmente los requisitos son mínimos, pues al tener ya un crédito con la financiera es más fácil que puedas tramitarlo.

Algunos de los principales son:

  1. Debes tener pagado cierto porcentaje de tu crédito principal (entre 20% y 90%) o antigüedad de por lo menos un año con tu actual préstamo
  2. Contacta a la entidad financiera con la que tienes el crédito vía telefónica
  3. Presenta tu solicitud (generalmente está disponibles en la página de internet de la entidad crediticia, prellenada, lista para descargar e imprimir) en sucursal más el número de folio, si es que fue asignado previamente
  4. Identificación oficial vigente
  5. Documento adicional. Sólo si el banco donde cobrarás el monto lo solicita.

Una vez ingresada tu solicitud generalmente te responden en un lapso de 48 horas, hecho que lo convierte en una forma de financiamiento ideal si de emergencias se trata.

La cantidad a refinanciar dependerá de muchos factores como el monto original de tu crédito, cuánto llevas pagado de él, tu salario, etc. Todo eso lo evalúan las financieras antes de darte una cifra o autorizar el monto solicitado.

Es importante que al aceptar esta renovación de préstamo consideres las siguientes recomendaciones de la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef).

Una de las principales es que de acuerdo con esta comisión y la Ley para la Transparencia y Ordenamiento de los Servicios Financieros, artículo 18 Bis 1, las instituciones sólo deben autorizar una ampliación de líneas de créditos a clientes que han pagado puntualmente y han demostrado que su comportamiento crediticio ha sido bueno. La institución deberá preguntarte siempre si deseas o no este aumento, y además deberá haber un consentimiento o aprobación de tu parte de forma verbal, escrita o mediante un medio electrónico.

Una vez cumplido esto y antes de aceptar, la Condusef te recomienda preguntarte lo siguiente:

  1. ¿Realmente necesitas refinanciar? Sé consciente de que esta operación también representa una responsabilidad que debes tomar muy en serio para evitar el sobreendeudamiento.
  2. Cuida tu historial crediticio. El hecho de que te ofrezcan más significa que es porque confían en ti y eres buen pagador, así es que procura mantener tu buena reputación e historial.
  3. Es una oportunidad de acceder a otros préstamos. Un límite más amplio puede darte la oportunidad de acceder a otros créditos como hipotecario o automotriz, no obstante, conlleva más responsabilidades, más conciencia de gastos por lo que deberás ser precavido.
  4. Valora si es el momento oportuno de aumentarlo. Antes de decidir, revisa tu capacidad de endeudamiento, ten presente que si no lo haces (y eres buen pagador), siempre tendrás la oportunidad de aumentarlo.

Para averiguar tu capacidad de pago tómate unos minutos y:

  • Anota todos tus ingresos totales
  • Suma todos tus gastos fijos y variables (renta o hipoteca, transporte, entretenimiento, préstamos personales, créditos rápidos en consumo, etc.)
  • A tus ingresos restarás tus gastos y obligaciones
  • Esa cantidad final representará tu capacidad endeudamiento o de pago.

¿Cuál fue el resultado de tu análisis? ¿Quedó en saldo negativo, o tus erogaciones mensuales son mayores a tus ingresos mensuales? Entonces tienes un problema de endeudamiento que debes resolver a la brevedad.

5. Revisa tus cuotas. Si se trata de refinanciar préstamo de nómina tus descuentos no deberán rebasar el 30% de tus ingresos.

6. No alteres tus hábitos de consumo y mantén tu nivel de deuda.

7. Antes de firmar, asegúrate que puedes con ella.

8. No olvides memorizar tus fechas de corte y depósito o descuento automático.

9.Sé puntual en tus aportaciones, con esto no afectarás tu historial crediticio.

La Condusef concluye que no es buena ni mala la refinanciación, siempre y cuando sea en el momento adecuado y bajo las condiciones anteriores.

¿Qué pasa si no pago mi refinanciamiento?

Usualmente no pagar un crédito o pagarlo con retrasos costará mucho resolver, en especial por la acumulación de la tasa de interés y comisiones.

Generalmente el despido o renuncia, cambio de empleo, jubilación, deceso, una desorganización de las finanzas personales son los principales motivos para no cumplir con este tipo de obligaciones.

Por ejemplo, para no caer en impago por cambio de empleo deberás notificar a la entidad con quien tienes el financiamiento sobre la nueva cuenta bancaria de donde podrán descontar el pago para evitar retrasos.

Si el impago es a causa de un fallecimiento o accidente que derive en discapacidad algunas instituciones ofrecen un seguro de vida para liquidar la deuda o reestructurar el plazo de los préstamos. Incluso existen seguros que cubren el desempleo. Todo dependerá de las cláusulas de tu contrato. A veces la contratación de este tipo de seguros es obligatoria.

Cuando ocurre el impago, diversas instituciones bancarias recurren a métodos para recuperar los préstamos como hacer llamadas, enviar correspondencia, además de boletinar al deudor en el Buró de Crédito.

También venden estas deudas a despachos de cobranza, de lo cuales, para recuperar el dinero, muchos recurren a:

  • Amenazas
  • Llamar a horas indebidas
  • Agresiones físicas o verbales
  • “Ejecutar un embargo”. Si debes sí pueden embargarte, pero para que eso ocurra un juez debe emitir la orden y un actuario autorizado debe notificarte personalmente.

Al refinanciar con descuentos vía nómina no tienes que preocuparte por retrasos o impago, pues el descuento automático te permitirá mantener tu buen historial. De hecho, la mayoría de quienes tienen préstamos de nómina no se retrasan en sus aportaciones de acuerdo con la ENIF 2018. Así es que no debes temer, sólo ser hábil e inteligente al utilizarla en algo que realmente valga la pena.

Mantén tus datos actualizados con la entidad que te otorgue el financiamiento para evitar retrasos y malos entendidos.

Tips para un refinanciamiento

Recuerda que la renovación crediticia te permitirá lograr las metas que te propongas como:

  • Eliminar deudas. Te permite liquidar por ti mismo las tarjetas crediticias, préstamos con otras instituciones, etc., y además tener un sobrante para lo que necesites. No permitas que estas obligaciones te abrumen, pues “dejar las cosas como están sólo empeorará tu situación”, dice la Condusef en su guía para liquidar obligaciones. “Es verdad que no hay recetas mágicas, pero tampoco existe un problema tan grave que no tenga salida”, advierte.
  • Tener efectivo para algún imprevisto. Si tienes un financiamiento pero surgió una emergencia, puedes solicitarlo para cumplir con ese imprevisto.
  • Lograr tus metas. Puedes ampliar tu financiamiento para cumplir tus objetivos en menor tiempo, como tener un negocio propio.
  • Acortar el tiempo de tus deudas. Si te encuentras en una mejor situación puedes eliminarlas de una sola vez.
  • No generar mal historial crediticio. Muchas veces los usuarios sobreendeudados  recurren a la consolidación, que consiste en que una sola institución atraiga todas estas obligaciones para que tú te preocupes por pagar a un solo banco. Sin embargo, esta decisión será una mala señal en tu historial crediticio.

Para que todo salga como quieres, es importante que antes de aceptar conozcas muy bien las comisiones, tasas de interés, el plazo, evalúa tu capacidad de pago y asegúrate de que los tèrminos sean las mismas.

Los créditos de nómina son confiables y uno de los favoritos entre los mexicanos, de acuerdo con la ENIF 2018. Al menos 6.1% de los entrevistados dijo tener dos o más de este tipo de créditos bajo distintas modalidades, como la renovación crediticia. Esto habla de una creciente confianza hacia esta forma de préstamo pues es seguro tanto para quienes prestan (instituciones financieras) como para los que se benefician de este, los trabajadores.

Cuídate de los estafadores. Hay quienes quieren aprovecharse de las personas que necesitan efectivo inmediato para enfrentar emergencias, así es que desconfía de quienes te ofrecen mucho dinero sin condiciones o aquellos que te piden pagos anticipados antes de darte una resolución. Revisa que la institución a la que acudas esté registrada ante la Condusef y la Comisión Nacional Bancaria de Valores (CNBV) y la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).

También desconfía de quienes te ofrecen borrarte del Buró, pues esto es imposible.

Kondinero tiene para todos sus clientes la refinanciación de créditos de nómina con requisitos mínimos. Para más información llama al 01 800 777 9000 o haz click aquí y consulta con nuestros asesores sobre las opciones que tenemos para ti.

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